Somos como una flor
que espera al sol y al nuevo día,
la vacía chimenea
sedienta de fuego y leña
la pequeña vela
que abraza tus pensamientos
el espejo que anhela tu mirada
los caminos de cada mañana
que buscan las alegrías para tu corazón
Y así esperamos florecer cada mañana
con el calor para nuestra alma
en cada amor, en cada mirada
mientras nos perdemos en los caminos
en las palabras
en las lunas
de todas las madrugadas
CRO